Ese mismo día, los sirvientes empacaron las pertenencias de Alana, ella fue llevada por el chófer al aeropuerto, la familia Evans ni siquiera la envió en su avión privado, no le volverían a dar ningún privilegio nunca más, y la querían tan lejos como se pudiera.
Los CEOS Evans pudieron recuperar algunos contratos, y eso fue por su forma recta de trabajar, más sin embargo Rafael no les permitió regresar a ser sus socios.
(...)
Después de algunos días de tener a las gemelas en la mansión Darkok, se le veía a Vladimir asomándose desde su cuarto con la almohada en la mano cuando era despertado por el llanto de sus hermanitas.
— Es hora de comer de las nenas, deja me levanto para ayudarte, Dimitrir.
— No, no te levantes, todavía no estás en condiciones, mejor yo te llevo a la bebé para que le des de comer de tu seno mientras yo le doy el biberón a la otra nena.
— Tenemos que llevar muy bien el control, ahora es Diane, para la próxima debe ser Angela, ambas deben comer de mi