CAPÍTULO 8: PLANTADO EN EL ALTAR.
CAPÍTULO 8: PLANTADO EN EL ALTAR.
Para sorpresa de todos, los días transcurrieron con total tranquilidad, pero Daniel era otra cosa, a pesar de que pasaba tiempo con su familia, no estaba allí del todo, su mente estaba en la mujer que hoy se convertiría en su esposa y a la que no había vuelto a ver desde aquel día. Aunque Jonathan trató de hacerlo entrar en razón, le dijo que todo estaba bien y en realidad lo estaba.
Puesto que su decisión de casarse ahora estaba lejos de la venganza, se había dicho a sí mismo que le gustaba Naomi, y se propuso tener un matrimonio real, había visto el ejemplo de su hermano, si Jonathan pudo encontrar la felicidad junto a Aurora, ¿por qué no él?
―Hijo, ¿ya estás listo? Recuerda que el novio debe llegar antes que la novia.
Renata se acercó y acomodó el botón de su solapa. Alzó la mirada y le sonrió.
―Cariño, ¿de verdad quieres casarte con esa chica? No dejo de pensar que únicamente lo haces, porque yo…
―Mama ―Daniel sostuvo sus hombros ―Voy a casa