UN ÁNGEL EN GARANTÍA. CAPÍTULO 56. Un secreto al descubierto
UN ÁNGEL EN GARANTÍA. CAPÍTULO 56. Un secreto al descubierto
Ivan sentía que la rabia se le salía por la piel como si la mala vibra pudiera tomar forma; ¡y Dios sabía que de esa él sí que tenía mucha. Así que después de revidar todo lo posible en el sistema de seguridad, se sentó para interrogar a su equipo con voz fría.
No era que desconfiara de ellos, pero evidentemente algo estaba sucediendo porque una brecha de seguridad así no era común. Los reunió en la elegante pero tensa sala de reuniones en el castillo y el jefe de seguridad a cargo parecía suplicar en silencio que la tierra se lo tragara.
—¿Cómo pudo escapar Dorina si por las cámaras no sale nada? —preguntó con seriedad.
El jefe de seguridad tragó saliva y respondió:
—Jefe, revisamos todo. No hay salida por puertas, ventanas ni pasillos. La única explicación es que pudo haber salido por una cloaca, alguna rejilla que no estaba cubierta porque… bueno, nadie en su sano juicio se metería en kilómetros de mierd@. ¿No es cierto?