Mundo ficciónIniciar sesiónEl taller de Nayra, antes conocido como el Corazón de Fuego, se convirtió en el lugar más misterioso y reverenciado de Nueva Aztlán. Ya no rugía con el calor de la fundición, sino que zumbaba con una energía nueva y extraña. Estaba permanentemente custodiado por las Garras, y solo los artesanos más confiables tenían permitido el acceso.
Dentro, se llevaba a cabo una nueva clase de creación. Nayra, guiada por los fragmentos de su educación en física, dirigía una serie de experimentos metódicos. Los artesanos, ahora sus “ingenieros”, le traían todo tipo de materiales, y ella probaba su interacción con el mineral activado.
El proceso era de un descubrimiento asombroso. Descubrieron que el cobre nativo, un metal blando que a veces encontraban en las rocas, se calentaba y crepitaba al conta







