Malika
-Despierta.-en susurro.
Abrí mis ojos, me levanté asustada de la cama buscando a quien me habló, pero estaba sola. Me dirigí al baño; como estaba sudorosa, me duché. Cuando terminé, me cepillé los dientes y me dirigí a mi habitación, busqué ropa cómoda y me cambié. Cuando estaba por ir a desayunar, lo escuché de nuevo.
-Malika.- en susurro.
-Mamá, ¿eres tú?.- pregunté buscando por la casa.
Pero no la encontré ni a Zaiden, así que tomé una manzana y salí de casa; me dirigí al corral de Dorotea.
-hola Dorotea, ¿dormiste bien?.- le pregunté con una sonrisa.
-baa.-
-si yo tampoco dormí bien, ven, vamos a buscar a mamá.-le dije haciéndole una señal de que me siga.
-baa.-
Estábamos caminando por la aldea cuando vi a Zaiden e Irina jugando. Me acerqué a ellos.
-¿qué hacen?.- les pregunte, sentándome junto a ellos.
-hermana estamos asiendo un plan, así podemos derrotar al tío Dante .- me dijo Zaiden, mirando con cuidado hacia atrás
-sí, Malika, ¿quieres unirte? .-me pregunto Irina