El tiempo transcurrió repentinamente más lento, como si todo a su alrededor se moviese en cámara lenta, el celular caía sobre el suelo estrellando su pantalla, esperaba solo recibir buenas noticias de parte de los hombres que había puesto de parte en la búsqueda de los pequeños Liam y William, y, aunque los pequeños hijos de Victoria habían aparecido a salvo, había recibido la peor de las noticias…Victoria estaba muriendo.

Dejándose caer sobre el sofá de su estudio, Laurent se aflojaba la elegante corbata; comenzaba a faltarle el aire, sentía su corazón latir demasiado acelerado y el calor había subido de golpe hasta su cabeza, aun a pesar de tener el aire acondicionado demasiado frio dentro de aquel espacio.

¿Cómo?, ¿Por qué?

Esas eran las dos cuestiones que lo golpeaban una y otra vez dentro de su mente, las muchas sonrisas de Victoria Bianchi que guardaba como un tesoro dentro de sus memorias, volvían repentinamente a invadir sus recuerdos, de nuevo, pudo verla entrar en aquel saló