ELARA
Intento liberarme de su agarre mientras él presiona todo su cuerpo contra el mío. Su pecho ruge contra el mío mientras me encierra entre el muro y su calor.
—Mi gatita —ronronea Maddox, lamiendo y rozando mi cuello.
—¡Lucas! —escucho gritar a Ryden a través del vínculo, seguido por el estruendo de una puerta y pasos corriendo. —¡Ellie, haz algo! —Jamás lo había oído tan desesperado.
—No quiero hacerte daño —le digo.
Lucas golpea la puerta del dormitorio. Mierda, está cerrada.
—¡Hazlo, Ellie! ¡No me deja tomar el control y va a marcarte! —La puerta tiembla de nuevo antes de que Lucas maldiga.
Maddox gruñe y su lengua roza mi cuello antes de que sus colmillos arañen mi piel. Un escalofrío de miedo me recorre la columna.
—¡Perdón! —susurro antes de darle un rodillazo entre las piernas. Maddox gruñe y se tambalea hacia atrás; lo empujo y me aparto.
La puerta del dormitorio se desploma justo cuando Maddox ruge y me empuja detrás de él.
Lucas entra con las manos levantadas. El miedo e