ELARA
Después de recibir los documentos de alta del doctor, Ryden nos lleva de regreso a la Casa de la Manada. Lucas se marcha a su habitación mientras Ryden me arrastra a la suya, antes de dejarse caer boca abajo sobre la cama. Supongo que no exageraba cuando dijo que extrañaba su cama.
Al entrar al baño, enciendo la ducha, deseando con desesperación lavarme. Mi piel se siente asquerosa, y mi cabello está aplastado contra mi cabeza. Al ponerme bajo el chorro de agua caliente, tomo el champú. El aroma familiar de su champú llena el aire a mi alrededor, y lo encuentro reconfortante, relajante.
Estoy enjuagándome cuando una corriente de aire me hace estremecer. Abro los ojos y me encuentro con Ryden entrando a la ducha. Se inclina y roza mis labios con un beso antes de pasar el brazo detrás de mí para tomar el jabón del estante.
Se da la vuelta y comienza a lavarse. Miro su espalda, mis ojos deslizándose hasta su trasero.
Toco su cadera con la punta de mis dedos, y él suelta una risita,