Para Diego, el pasado era su tabú, un tema del que cualquiera podía burlarse. Y lo peor era que no tenía forma de defenderse.
Ezequiel había estado con tantas mujeres y aún tenía el descaro de decir que era leal. Diego, por su parte, solo había amado a Irene, pero la etiqueta de 'infiel' parecía seguirlo eternamente.
Sin embargo, Diego sabía que no podría limpiar esa mancha. No podía cambiar lo que había vivido; solo podía intentar mostrarle a Irene su verdadero yo en el futuro. Afortunadamente, ella había comenzado a ceder, y al menos ahora podían interactuar como amigos.
Pero aunque su pasado fuera un tema recurrente, eso no significaba que aceptara las burlas de Ezequiel.
—¿Sabes qué tipo de hombres odia Ire? —preguntó, levantando una ceja.
—Como si supieras algo. Si lo supieras, ¿Ire se habría divorciado de ti? Es obvio que lo que más odia es a hombres como tú. —Ezequiel soltó una risa burlona.
—Si menospreciarme y atacarme te hace feliz, adelante. Te advierto que lo que Ire más od