—No puedo creer que él haya traicionado a Dimitry después de todo lo que los Romanov han hecho por él. Su último club lo financió Dimitry incluso —señaló a Satarah negando con la cabeza profundamente decepcionada.

—¿Y tú realmente crees que lo hizo? Creo que es una suposición, puede que no sea él en realidad...

Polina negó con la cabeza bajando la mirada.

—No lo sé.

Pero dentro de ella sí lo sabía.

—¿Qué te pasa, Polly? Sé que hay otra cosa en tu cabeza y no me lo estás diciendo.

Ella dejó salir un suspiro recordando que Marco se había marchado sin dirigirle la palabra. Ni siquiera intercambiaron una mirada.

Ella quería consolarlo, también estaba preocupada por Gian como amiga pero para Marco era mil veces peor.

Era su hijo.

—Eso no tiene importancia ahora.

—Claro que sí la tiene. Necesito distraer mi cabeza con algo que no sea pensar en que mi hermana y mi mejor amigo están secuestrados o me volveré loca. Lo digo enserio, dime qué te sucede. No pareces tú, estás preocupándome y sé que