Al día siguiente, Serena se había restaurado el color original del cabello y había empezado una transmisión en vivo. Antes, había coordinado con el equipo de prensa de The Mysterious Family para asegurarse de no revelar demasiado, ya que el proyecto seguía en discreción. Solo le habían dado permiso para mencionar detalles relacionados con la película que despertaran interés sin comprometer nada delicado.
Ella había publicado un aviso en Twitter anunciando el directo y, al iniciar, el número de seguidores aumentó rápidamente. La pantalla se llenó de comentarios:
—¡Quitad el filtro!
—Serena, cuánto te habíamos echado de menos, ¿hace cuánto que no publicabas?
—¿Estás en el rodaje ahora?
Los espectadores pedían que apagase el filtro de belleza. No estaba acostumbrada a la interfaz de la plataforma, pero al fin lo desactivó, y su rostro apareció nítido y real. Entonces empezaron a llover los regalos virtuales.
Muchos de sus seguidores eran silenciosos, pero con alto poder adquisitivo. Desd