Cuando sonó la alarma del despertador, Sandra, se despertó. A continuación, se dio una ducha caliente. Luego, se vistió con una camisa corta azul y unos jeans ajustados; después, se trenzó el cabello y se puso unas sandalias negras. Para finalizar, se aplicó un poco de maquillaje en los ojos y los labios.
Finalmente, salió de su habitación y se dirigió a la de su madre, Valeria.
Al entrar, se dio cuenta de que su mamá, aún dormía debido a los analgésicos que le había administrado después de varios días sin poder descansar. Por lo tanto, abrió las ventanas para dejar entrar luz, y en ese momento, Valeria despertó, exhausta y aún más cansada de lo habitual. Como quería seguir durmiendo un poco más, Sandra, se preocupó aún más por el estado de su madre. Entonces, se armó de valor y, con cariño, se acercó a ella, ayudándola a levantarse y llevándola al baño para que se duchara.
Mientras su mamá se bañaba, Sandra buscó la ropa que había dejado preparada, la sacó del closet y la coloc