ASHTON GARDNER
Habíamos terminado de almorzar, Liss estaba en mi regazo con su cabeza sobre mis piernas, puse una manta que había en el sofá para abrigarla, mientras acariciaba su cabello.
— Amor...
— MMM?
— ¿Cómo te sientes para volver a la casa?
— Un ratito más, quiero estar solita contigo un ratito más.
No pude evitar sonreír, era como una niña pequeña haciendo un pequeño berrinche, como una gatita regalona.
— Podemos estar todo el tiempo que quieras amor, cuando estés lista volveremos.
Se sentó y subió sobre mí con sus muslos apretando los míos y su centro rosándome peligrosamente.
— ¿Qué tramas Lissandra?
Sus caderas empezaron a rozarse despertando mi entrepierna mientras besaba mi cuello, no pude evitar dejar salir un gruñido bajo.
— Liss...
— Te quiero Ash, te quiero ahora.
La besé y la levanté entre mis brazos para llevarla a la cama, ella respondía mi beso mientras sus piernas se cruzaron en mi cadera, cada paso que daba su centro se rozaba con mi entrepierna causando un infi