Capítulo 43. Amor vs. guerra
Alina entró en la habitación con el corazón aún agitado. Cerró la puerta con suavidad, como si al hacerlo pudiera guardar los secretos recién descubiertos entre los muros de piedra del castillo. La tenue luz de la lámpara iluminaba apenas los bordes de su vestido y su rostro pensativo.
Devon estaba junto a la ventana, de espaldas, observando el cielo cubierto de nubes. Cuando oyó sus pasos, se giró despacio. Su mirada se posó en ella con una mezcla de calidez y cautela.
—¿Dónde estuviste? —preguntó, su voz grave pero no acusadora.
Alina dudó un segundo, luego sonrió con dulzura—. Vagando por el castillo. Necesitaba despejar mi mente.
Devon dio un paso hacia ella, cruzando la distancia con una calma que enmascaraba el leve brillo de inquietud en sus ojos. Al llegar a su lado, alzó una mano y la tomó suavemente de la barbilla, levantando su rostro hacia el suyo.
—¿Es verdad eso? —inquirió, buscando en sus pupilas algo más allá de las palabras.
Ella levantó su mano y la colocó sobre la d