ELISSE
¡¿Cómo podía estar pasando esto?!
¡Nos sacaron del hospital!
Papá intentó hacer algo para que no nos humillaran de esa forma, pero ninguno de sus amigos pudo hacer nada al respecto. ¿Qué demonios le pasaba a ese asqueroso negro? ¿Creía que tenía el control aquí?
Al final, terminé de brazos cruzados en el auto de papá, enfurruñada.
—¿Quién demonios se cree que es? —mascullé—. ¡Esto es Hiraeth, es nuestro territorio! —protesté.
Mi padre, a mi lado, suspiró.
—Voy a hacer que pague esta humillación con creces.
Fruncí el ceño. Esperaba eso, sí, ¿pero cuándo había cumplido papá con su palabra últimamente.
Él quería hacer que Lars se casara con Karen para abrirse camino y asegurarse volverlo su marioneta, pero Lars ya no era el mismo de antes, ya no escuchaba.
Y ambos sabíamos que para hacerlo escuchar necesitábamos a mamá, pero no teníamos ni idea de en dónde estaba. Sin mamá estábamos perdidos. Bueno, él estaba perdido, yo tenía mis propios planes.
Llegamos a casa y fui directo a mi