Emma:
Saber que Mikael, mi Mika, le habían disparado me dió un vuelco en el corazón, estaba asustada, pensando tantas cosas, me hubiese puesto de igual forma por Carlo o Axel, ellos tres se han convertido en parte Importante en mi vida y no quiero que ninguno de ellos salga lastimado.El vuelo hacia acá me pareció una eternidad, quería estar junto a el a como diera lugar. Después de esa travesía, nos instalamos en el hotel y fuimos al hospital, dónde nos dieron buenas noticias sobre el estado de salud de Mika y afortunadamente, el estaba fuera de peligro.
La doctora que lo atendió, era una mujer sumamente hermosa, alta y rubia, con facciones delicadas incluso, era más bonita que yo, pero no me gustó en cómo miraba a Mika.
¿Qué se creía esa mujer? Tocar a así a mi novio, estaba de más.
Jamás he sido una mujer celosa, los celos me daban igual, jamás los sentí, pero ahora.. Ahora estaba experimentando por primera vez, lo que eran los celos. La forma en que esa mujer le sonreía a Mika, en cómo le tocó el hombro, eso me revolvió el estómago.
Era más que obvio que esa mujer y el tuvieron algo, no sé porque no me sorprende, Mika antes era un mujeriego sin remedio.
—¿Por qué estás así bonita? —me tomó la mano— estás un poco roja.
—Dime algo Mikael ¿Ustedes tuvieron algo? Y quiero la verdad —me solté y me crucé de brazos.
—A ver —se acomodó un poco en la cama—, me encanta que me llames Mikael, pero justo ahora lo dijiste en un tono molesto —hizo una pausa—, con lo otro ¿A que te refieres?
—Pues la doctora Anastasia, de ella hablo, ahora responderme Mikael.
El desvío la mirada y después miró a Carlo y Axel que estaban que estallaban de la risa.
—Vamos Ruso —se burló Carlo—, respóndele a tu novia.
—Tienes que ser sincero hermano.
Axel y Carlo le estaban echando más leña al fuego.
—P-Pues si bonita, pero fue hace años —negué—, bueno, fuimos novios en la secundaria ¿Si? Luego terminamos y antes de irme para Chicago, pasamos el rato.
—Lo sabía —negué—, esa mujer no sabe disimular ni un poco, está más que claro que aún le gustas.
—Pues si es así no me importa, yo estoy contigo mi amor, soy un hombre fiel —me sonrió.
—Dios —me froté los ojos—, espero no tener que lidiar con más mujeres.. Quiero tener paz.
—Eso te pasa por promiscuo Mika —Carlo rió—, ahora dejaste a muchas mujeres flechadas.
—No ayudas para nada Carlo —Mikael bufó.
—¿Y tú? —le pregunté y dejó de reír— ¿Tienes alguna ex loca que contarme?
—No —negó—, yo no tuve muchas novias, soy alguien tranquilo.
—Si claro —Axel rodó los ojos.
—No hables mucho Alemán —Mikael lo señaló—, tu tienes una loca que es peor y de paso que está suelta.
—Basta —me fastidié—. ya no hablemos de eso ¿Si? —asintieron— y tú —señalé a Mika—, más te vale ponerle el claro a esa mujer que tienes novia, no estoy para lidiar con estas cosa Mikael.
Y hablando de la doctora, entró por la puerta con una sonrisa parecida al gato de Alicia en el país de las maravillas, entró junto con una enfermera que al ver a Mika sonrió coqueta.
Dios mío ayúdame..
—Bueno Mika, vine a hacerte la revisión y colocarte tu antibiótico —el asintió y se giró a nosotros—, tienen que esperar afuera.
Oh no amiga, no pienso dejarte con mi novio aquí.
—Yo me quedo aquí con mi novio —sonreí— Carlo, Axel ¿Podrían traerme un café? Que no esté tan cargado y un sándwich de jamón, por favor.
—Claro amor —Carlo vino a mi y me dió un beso en los labios, al igual que Axel, los dos salieron de la habitación.
La doctora y enfermera, me miraron con los ojos abiertos y como si tuviese dos cabezas, yo jamás voy a ocultar mi relación con ellos, no me avergüenza tener tres hombres que son solo míos.
Ella carraspeó y empezó a atender a Mika, le abrió las gasas en su estómago y empezó a limpiar la herida junto a la enfermera, yo sostuve la mano de Mikael mientras el se quejaba del dolor, me acerqué un poco más a él y le acaricié la mejilla y después le hablé.
—Tienes que aguantar mi amor —me miró—, prometo que cuando salgamos de aquí y vayamos a casa, voy a cuidarte y consentirte.
—¿Solo a mi? —preguntó suavemente— no quiero a los otros dos encima de ti.
Reí —Eso será imposible Mikael, tengo dos novios más a los que tengo que darle mucho cariño, pero tú ahora estás herido y te daré un poco más de atención, pero tiene que ser nuestro secreto —le susurré.
—Ah —se rió—, nuestro primer secreto, tenemos un trato bonita, ahora dame un besito aquí —puso su dedo en sus labios.
Me acerqué a él y le di un beso corto, me acomodé de nuevo en la silla y ya ambas mujeres estaban por terminar, ellas estaban calladas haciendo lo suyo.
—Está listo Mika —ella le sonrió—, ahora solo tienes que descansar, por ahora estarás aquí para ir monitoreando tu herida.
—Esta bien —fue lo único que salió de sus labios y ella se descolocó un poco.
La mujer me miró y se metió las manos en los bolsillos de su uniforme.
—Supongo que tú te quedarás con el hoy —su tono era frío y odioso—, me había quedado con el antes que llegaras.
—Se lo agradezco mucho doctora —sonreí—, gracias por cuidar bien de mi novio, y respondiendo su pregunta, si, esta noche y todas las que siguen me quedaré con el, hasta que salga de aquí.
—Eso es bueno —miró a Mika—, nos vemos mañana Mika, ten buena noche.
—Gracias Doctora —asintió.
¡Pum! En tu cara..
Ella se puso seria porque ya no era "Anastasia" si no Doctora, cómo debe ser, bien hecho por Mika por darme mi lugar, ella asintió y salió junto a la enfermera, ya ambos solos le di un besito.
—Eres una celosa —entrecerró los ojos.
—Lo seré contigo y con mis otros dos amores —sonreí— ahora sí Mika.. Dime que fue lo que pasó y sin mentiras por favor.
Lo ayudé a acomodarse y soltó un suspiro pesado.
—Lo se que mi padre estaba enfermo era mentira, quería que viniera solo para obligarme a seguir con el negocio de la familia y cuando me negué, todo salió de control.
—No entiendo, si no quieres hacer algo, no puede obligarte a hacer nada, eres un hombre bastante crecido para eso —fruncí el ceño molesta.
—No es así como lo dices amor —lo miré confundida—, escucha.. —hizo una pausa, debatiéndose si decirme o no—, desde hace muchos años, mi familia ha pertenecido a la mafia Rusa, es una de las más importantes que hay en el país, mi padre siguió los pasos de mi abuelo y el esperaba que yo lo hiciera.
Lo que estaba escuchando me dejó en shock, pero Mika siguió.
—Los Voslov, se encargan de traficar armas y todo tipo de droga, mi padre —miró hacia la puerta—, el quería que yo siguiera ese camino, me entrenó desde niño, se usar un arma y se defensa personal y muchas cosas más.. Pero eso no era lo que yo quería, le rogué para estudiar Arquitectura y no se negó ya que su fachada para lo que hace es una compañía de arquitectos, fui a la universidad en Alemania donde conocí a los chicos, cuando me gradué el quería que yo tomara las riendas de la empresa, lo complaci porque pensaba que estaba haciendo el bien.
Suspiro pesadamente.
—Fui presidente de la empresa, pero a la vez estaba empezando a traficar armas a varios países, pero dentro de mi... No me sentía bien, sentía que esa no era mi vida, no era lo que yo quería, Anton, mi hermano, hizo un desfalco por un cargamento de armas que se perdió y quería acusarme de aquello hasta que demostré mi inocencia —me miró—, me harté de ese mundo, le pedí a mi padre el dinero de la herencia del abuelo y me la dió, me dejó ir a Chicago pensando que lo mío era una rabieta y que volvería.
—Por eso fingió que estaba enfermo.
—Así es —suspiró—, me hizo regresar para que lo hiciera y me negué.. Estaba con la idea de, quererme casar con esa mujer, no le iba a hacer hasta que —me miró triste—, me amenazó con hacerte daño.
—¿Qué? —me tapé la boca con las manos.
—Si —bajó la cabeza—, me había investigado, sabía de tu existencia, me hizo saber que si no obedecía sus órdenes, te lastimaria.. Pero su forma de hacerlo me dió asco y mi ira explotó.
—¿Que te dijo Mikael?
—Te quería para el y mi hermano —abrí los ojos sorprendida— estallé en rabia Emma yo.. lo asesiné.
De sus ojos salieron lágrimas y se tapó los ojos frustrado.
—Jamás pensé que haría algo así con el, pero tan solo hacerme la idea de el haciéndote daño, tocándote, no —negó—, no podía dejarlo vivo Mi amor, entonces... Use todo lo que el me había enseñado por años, sus guardias me habían disparado y por eso estoy aquí.
—Mika... Amor mírame —lo hizo y le limpie las lágrimas—, hiciste lo correcto, si lo dejabas así, me haría daño y quizá a ti también o a los chicos —tomé sus mejillas.
—Haría cualquier cosa por ti mi bonita —tomó mi mano en su mejilla—, mataría a cualquier persona que quiera lastimarte ¿Sabes por qué?
negué —¿Por que?
—Porque te amo Emma —jadee—, si, me enamoré de ti como un idiota, jamás en mi vida había amado tanto a alguien como te amo a ti.. Daría mi vida para protegerte, tu eres mi cielo Emma, te amo.
Acaba decirme que me ama, joder me dijo que me ama. ¡Mikael me ama!
—Mikael —sentí mis ojos llenarse de lágrimas— ¿Lo dices en serio?
—¡Por supuesto! —rió— lo digo muy en serio, cuando llegue aquí, solo pensaba en ti, en qué no te lo había dicho antes de venir aquí y creeme que me estaba arrepintiendo de no haberlo hecho, pero ahora.. Estás aquí y sabes que te amo, no me arrepiento de habértelo dicho Mi amor.
Me senté a su lado y bese sus labios una y otra vez mientras el reía, escucharlo decir que me amaba hacía que mi corazón saltara de alegría.
Mikael me ama, me ama.
Axel y Carlo ¿Sentirán lo mismo?
Quisiera saberlo..