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Jamie:

Al día siguiente..

Me levanté temprano para ir a la constructora, papá nos llamó porque quería hablar con nosotros sobre algo importante.

Fui al baño y me asee, cuando salí un olor delicioso llamó mi atención, fui hasta donde provenía aquel olor y me encontré con Emily preparando el desayuno.

Estaba de espaldas a mi y me acerqué a ella y la rodee con mis brazos, ella dió un respingo cuando me sintió detrás de ella.

—Me asustaste.. Buenos días.

La voltee para que me mirara.

—Buenos días esposa mía —sonreí—, huele delicioso —mire detrás de ella.

—Hoy les prepararé el desayuno, tu padre me llamó y me dió el día libre —se encogió de hombros.

—Que raro ¿No crees? —ella se encogió de hombros y yo fruncí el ceño.

—No lo sé, mejor ayúdame a terminar el desayuno ¿Si?

—Si me das un beso, te ayudo —sonreí de lado.

—Que tramposo —me miró mal—, pero te lo voy a dar.

Me acerque a ella y la tomé de la nuca y estampe mis labios sobre los suyos, me encantaba el sabor a café que su boca tenía.

—Ya estoy conforme así que voy a ayudarte, Julian no tarda en levantarse.

Ella solo asintió.

Preparó pan tostado junto con huevos, estos tenían tomate y cebolla, cosa que me pareció lo más rico que he probado, junto con café y jugo, también colocó cereal y leche sobre la mesa ya que al rudo de mi hermano le encanta comer cereal con leche.

Y hablando de el, llegó medio dormido y se sentó frente a mi. El comedor era pequeño, solo para cuatro personas, pero así es mejor porque podemos estar más cerca de ella y hablamos muy a gusto.

—Me quedaré hoy aquí —dijo Emily mientras metía un trozo de pan a su boca— cómo su padre me dió el día libre, quiero hacer la limpieza de mi habitación y lavar la ropa.

—Está bien -dijo Julian tomando su café.

Terminamos de desayunar y Emily recogió la mesa, Julian se fue a bañar y yo solo me cambié ya que yo ya me había duchado.

Me coloque un traje sin corbata color gris, esperé a Julian en la sala ya que el se toma su tiempo para arreglarse.

Emily sonrió y se acercó a mi, la tomé de la cintura y la pegué a mi.

—Estas muy apuesto —me miró sonriente.

—Gracias, dame otro beso.

Ella negó divertida y me dió un beso corto pero magnífico.

—¿Te he dicho cuánto me gustan tus besos?

Negó, Dios que linda es esta mujer. 

—Me encantan tus besos, son adictivos.

Pasé mi pulgar sobre sus labios y ella cerró los ojos, se veía tan hermosa.

—Bien, vámonos.

Julian rompió nuestra burbuja, me separé de Emily y ella acomodó el saco de mi traje y me dió otro beso, luego fue donde Julian y le plantó otro, pero como Julian es Julian, la besó salvajemente, luego la soltó y sonrió de lado mientras que Emily tenía las mejillas sonrojadas.

—Adios amor —se despidió de ella.

—Adios —hizo un ademán con la mano para despedirse.

Salimos del departamento y bajamos al estacionamiento y subimos al auto, Julian manejó hasta la constructora, media hora después llegamos a la misma.

Saludamos a algunos trabajadores incluyendo a Jason que se ha vuelto nuestro único amigo en este tiempo.

Entramos a la constructora y subimos al segundo piso de esta y entramos a la oficina de papá, el estaba recargado sobre su silla bebiendo café, algo típico de el.

—¡Hijos! —dijo felíz— que bueno que vinieron, sientense.

Ambos tomamos asiento frente a el.

—¿Para que nos llamaste papá? —pregunté.

El dejo la taza sobre su escritorio.

—Pues para hacerles un anuncio importante —asentimos—, todas estas semanas me he dado cuenta del enorme cambio que han tenido, créanme que eso me hace sentir muy orgulloso de ustedes —hizo una pausa—, se han vuelto responsables y maduros, también más trabajadores y eso me complace mucho.

El sonrió aún más.

—Se que cometí errores en el pasado, que ya no puedo remediar hijos míos... Pero aún estoy a tiempo de remediarlo un poco y recuperar a mis hijos, se que casarlos a la fuerza con Emily no estuvo bien, pero agradezco tanto que ella los haya hecho cambiar tanto —dijo con nostalgia—, se que y confío plenamente en que ustedes podrán con el siguiente paso.

—¿A qué te refieres papá? —Julian frunció el ceño.

—Que.. A partir de mañana van a tomar las tiendas de la empresa —sonrió—, ya están listos para llevar la empresa, se que están capacitados para esto y quién mejor que ustedes que son mis hijos para llevar la constructora hacia lo más alto. 

—¿Estás seguro de eso papá? —pregunté sorprendido.

Lo que dijo nos dejó totalmente sorprendidos.

—Totalmente seguro de eso hijo, ya estoy demasiado viejo para seguir trabajando —hizo una mueca—, quiero estar en casa descansando, compartir más tiempo con su madre, pasear por las tardes o jugar a las cartas con alguno de ustedes... También estar fuerte y cuidar de mi salud, un viejo como yo no puede estar bajo tanto estrés, además.. —su sonrisa se ensanchó— quiero estar fuerte para cuando lleguen mis nietos, porque quiero muchos.

Julian y yo fruncimos el ceño ¿Nietos?

—A ver papá calma un poco tus ansias —Julian rió nervioso— ¿Nietos? ¡Jah! A penas nosotros estamos aprendiendo a vivir y entablando una relación con Emily y quieres ¿Nietos?

—Lo sé lo sé —levantó las manos en rendición— es solo un decir, pero lo de que tomen las riendas de la empresa es en serio.

La verdad ¿Si estábamos capacitados? ¿Podríamos con eso?

—Esta bien papá —dijo Julian firme—. Jamie y yo tomaremos la empresa, haremos nuestro mejor esfuerzo para seguir con el legado de la familia.

Mi padre sonrió orgulloso.

—Si papá, haremos lo que podamos.

—Se que lo harán bien, mejor que yo incluso, confío en ustedes, Jamie estará en la vicepresidencia, serás la mano derecha de Julian ¿Estás bien con eso? —asentí— Julian estará a la cabeza de esto, por lo tanto será un poco más la responsabilidad, ahora.. Deben conseguir un gerente que esté capacitado para el trabajo, ya que el anterior renunció hace tres días y no he encontrado a nadie capaz para el puesto.

—Conozco a alguien capacitado para el puesto papá, solo déjame hablar con el —el asintió— es de total confianza —volvió a asentir.

—Emily seguirá siendo la secretaria del presidente, o sea Julian y tú —me miró—, tendrás que encontrar una secretaria ya que no había vicepresidencia antes.

Yo quería a Emily conmigo también.

Pero no pudo hacer eso, no debo sobrecargarla de trabajo.

—Esta bien papá —Julian hablaba firme.

—Siendo así, ahora mismo van a conocer a su primer cliente, es alguien importante, ya debe estar por llegar —llamó a alguien—, ya está aquí.

Esperamos un poco y a la oficina de papá o bueno a la de Jamie, entró un hombre alto y parecía imponente, su aura desprendía miedo, fruncí un poco el ceño, este tipo no me daba buena espina.

—Hijos, el es Andy Tatum —presentó al hombre—, es un empresario que viene de Canadá y el será su primer cliente.

—Un placer conocerlos señores Allen —dijo con una sonrisa.

—Un gusto, Jamie —estreché su mano y Julian hizo lo mismo.

—Bueno, yo me retiro hijos, están en su oficina, hagan esto hoy y mañana ordenamos todo con más calma —papá nos abrazó a ambos— mucha suerte, se que lo harán bien.

Y sin mas salió de la oficina, Julian se sentó en el puesto que era de papá y se acomodó, yo me senté frente a el y el sujeto a mi lado.

Tomé una libreta que estaba en la.mesa junto con un bolígrafo para empezar a anotar todo lo que se haría o diría.

—Bueno, ya que sera nuestro cliente ¿Que es lo que busca en nuestra constructora? —preguntó Julian.

—Pues verán —se acomodó el saco— llegué hace poco de Canadá, allá tengo una pequeña empresa y decidí trasladarla a Chicago, así que necesito contruir un pequeño edificio de tres pisos —le dió unos papeles a Julián, yo anotaba todo—, no muy grande, solo lo suficiente para tener espacio y pues, algunos conocidos me los recomendaron y pues aquí estoy.

—¿Para cuándo la necesita? —pregunté.

—Mínimo cuatro meses, ya que estoy haciendo algunos pendientes para mover mi pequeña empresa aquí, por el presupuesto no se preocupen —sonrió con arrogancia—, pero antes de eso, me tomé el atrevimiento de investigarlos.

—¿Investigarnos? —Julian frunció el ceño y yo también.

—Si, así es, lo hice porque quiero algo que sea seguro... Hace un año contraté los servicios de una constructora cuyo nombre no diré, el caso es que tenían materiales de muy mala calidad y por ese pequeño error varias personas resultaron lastimadas y termine perdiendo mi dinero, por eso investigue su empresa, para asegurarme de que no perderé dinero.

El tipo se se ve que es egocéntrico.

—Le aseguro señor Tatum, que nuestra constructora es la mejor del estado y una de las mejores del país —dije firme—, puede contar con nosotros para construir su edificio.

—De eso estoy seguro —dijo con una sonrisa— ¿Tenemos trato?

—Por supuesto, puede venir en dos días para que firme el contrato y hacerle un presupuesto y hablaremos con uno de nuestros ingenieros para la estructura de su empresa —Julian sabía lo que hacía.

—Siendo así —se levantó—, entonces nos vemos en dos días, será todo un placer trabajar con los Allen, me retiro.

Los tres estrechamos las manos y el salió de la oficina aún con su aire de superioridad.

—Joder, nuestro primer cliente —Julian estaba emocionado.

—Si —solo eso pude decir—, espero que todo salga bien.

—¡Claro que sí! Vamos a demostrarle a papá que si podremos, pero por ahora.. Tenemos que celebrar, papá le dió el día libre a todos aquí, vamos por unas cervezas y celebremos esto junto a nuestra esposa —sonrió.

Claro, tenemos que celebrar esto junto a ella.

—Vamos entonces —sonreí.

Ambos cerramos la oficina, ya mañana nos encargariamos de los detalles de nuestro puesto.

Salimos de la constructora, ya era de tarde, Julian manejó hasta una tienda y compró algunas cervezas para celebrar nuestro ascenso, también compró unas papas y otras cosas para comer.

Rato después llegamos al departamento donde estaba Emily sentada viendo la TV.

-¡Linda! ¡Tenemos una gran noticia! —dije alegre.

Ella se levantó y llegó hasta nosotros, coloqué todo sobre la mesa.

—¿Por que tan alegres? —se cruzó de brazos.

Julian y yo le contamos todo, sobre el puesto de ambos y nuestro primer cliente.

—¡Que bien! —chilló emocionada y nos abrazó— esto merece una celebración, en serio se que lo harán muy bien, su padre no se va a arrepentir de haberlos puesto al mando.

—Esperemos que así sea —Julian le dió un beso— celebremos, trajimos cerveza y otras cosas.

Saqué las cervezas de la bolsa y empezamos a tomar, Emily colocó música y empezamos a celebrar entre los tres.

El yo de antes se hubiese ido a un bar a beber y coger con alguna chica, pero ahora no, solo quiero celebrar mi logro con mi esposa.

Rato después Emily tomó a Julian de la mano y lo levantó del sofá.

—Baila conmigo guapo —ella reía.

Estaba un poco ebria, pero estaba contenta.

Julian tomó a Emily de la cintura pegándola a él, y ambos empezaron a bailar al ritmo de Sway de Michael Bublé, ella lo miraba con amor y el lo hacia de la misma forma..

—Eres hermosa —el le acarició la mejilla—, y eres mi esposa.

Ella solo rió, sus mejillas estaban sonrojadas por el efecto de la cerveza. Después de bailar con Julian el se sentó en el sofá y yo me levanté para bailar con ella.

La tomé de la cintura y empecé a moverme al ritmo de la canción, ella quiso repetir la canción.

—Esta será nuestra canción —sonrió ampliamente— solo nuestra.

—Claro que si mi amor, lo será.

Terminamos de bailar y ella empezó a beber otra cerveza.

—Amor, creo que has bebido mucho —Julian intentó quitarle la cerveza pero ella corrió huyendo de el haciéndome reír.

—¡Solo una más! ¿Si? —sonreía.

—Solo una —amenazó.

Ella empezó a tomarla como si fuese agua, Julian y yo nos sentamos de nuevo en el sofá, ella se colocó frente a nosotros, colocó una canción sensual y empezó a bailar, se veía sexy en ese vestido de flores, su cabello desordenado y descalza.

Empezó a moverse de forma sensual y atrevida.

¿Desde cuándo ella era así?

Subía sus brazos y con su mano empezó a acariciarse, se seguía moviendo de forma sensual, luego pasó sus manos por sus muslos levantando un poco su vestido.

Miré a Julian y el no apartaba los ojos de Emily, tenía la mirada fija en ella, luego la miré y seguía subiendo su vestido dejándonos ver sus bragas color rosa pálido, sus piernas Lucían apetitosas.

No pienses cochinamente Jamie.

Cuando la música se detuvo, ella nos miró intensamente, caminó tambaleándose un poco, llegó hasta mi y se sentó sobre mi regazo dejándome sorprendido, se abrió de piernas colocándolas a mis costados.

—Quiero hacerlo con los dos —empezó a desabrocharme la camisa—, hace mucho tiempo que no se lo que es tener sexo y quiero hacerlo con mis esposos.

Sus suaves manos acariciaron mi pecho, ya para este punto me estaba poniendo duro.

—Emily cariño, estás ebria, no quiero hacerlo contigo estando así —puse mis manos en su cintura.

Ella hizo un hermoso puchero que no dude en besar.

—No estoy tan ebria como crees —comenzó a moverse encima de mi— estoy en mis cinco sentidos y quiero sentirlos dentro de mi.

Tomó mis manos y las colocó sobre sus pechos.

—Tocalos, te estoy dando mi consentimiento cariño —se seguía moviendo, yo ya estaba duro.

—Emily —dije en tono de advertencia, no quiero tomarla de esa forma pero me lo está haciendo difícil.

—Jamie —cerró los ojos y empezó a gemir mientras se seguía moviendo en mi regazo— quiero que me toques —miró a Julian— hazlo tu.

El sonrió de lado y se acercó más a mi, se colocó a mi lado e hizo a un lado el cabello de Emily y bajo un poco el vestido dejando su hombro descubierto, le empezó a besar el hombro y después el cuello, ella gemía sobre mi.

Dios esto es muy difícil..

—Ah.. —soltó un gemido.

—Mierda —Murmuré—, Julian detente, ella no está consciente.

Ella me miró fijamente y me sonrió de lado, se mordió el labio inferior mientras que Julian seguía besando su cuello.

No está tan ebria como parece, que traviesa.

—Hoy me harán el amor, ya que no tuvimos Luna de miel, quiero que me follen esta noche..

Joder....

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