ANDY DAVIS
—Señorita Davis, no pensé que nos volveríamos a ver —dijo Nick con una sonrisa amplia, como si fuéramos viejos amigos. El mismo hombre de R.R. H.H. con el que había convivido de cerca cuando trabajé para Damián sin saberlo—. ¿Qué haces por aquí?
—Lo mismo pregunto, ¿no se supone que trabajas en otra sucursal? —pregunté con una gran sonrisa mientras caminábamos juntos en el interior del edificio.
—Despedir a Smith me hizo ganarme un ascenso —contestó con la frente en alto—. Ahora coordino el área de Recursos Humanos de toda la empresa.
—Me alegra —dije con sinceridad, pues parecía un buen hombre—. Yo&h