Capitulo 22.

Capítulo 22.

La presión me estaba matando. Desde que ese maldito se había instalado en el castillo, sentía como si llevara una pesada losa cargada a la espalda. No podía respirar, no podía pensar con claridad. Y lo peor de todo es que Calen… Calen no ayudaba en nada.

De hecho, apenas unos días atrás habíamos tenido otra discusión. Una de esas que te desgarran el alma. Todo porque me negué a cumplir con una de las tantas exigencias absurdas de ese hombre. Mi padrastro siempre encontraba la manera de enredarlo todo, de manipular la situación para salirse con la suya, y yo… yo estaba atrapada en medio de su juego sucio.

Después de esa pelea, no quise saber más nada del mundo.

Me encerré en mi habitación y me dediqué a estudiar plantas. Era lo único que conseguía calmarme, aunque fuera un poquito. Analizar sus propiedades, escribir fórmulas en mi cuaderno, imaginar nuevas mezclas. Me aislé tanto que, por días, apenas crucé palabra con nadie.

Bueno… con casi nadie.

Erika, como siempr
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App