Capítulo 49
La casa se encontraba sumida en una quietud casi sagrada. En la habitación de los niños, Thiago ha terminado de acomodar a April, Eros y Gael entre almohadas y cobijas suaves luego de que se quedaran dormidos con la segunda película. Este les acaricia el cabello con ternura antes de acurrucarse a su lado, abrazándolos como si no quisiera soltarlos nunca. En el pasillo, Sofía observa la escena desde la puerta entreabierta sin decir una sola palabra. Ella solo se lleva la mano al pecho, sintiendo una presión dulce y pesada a la vez.
Sin poder evitarlo ella se hace mil preguntas en su cabeza sobre qué habría pasado si nunca le hubiese ocultado a Thiago el hecho de que tenía dos hijos más. Pensaba en si las cosas hubiesen sido diferentes de no haber sufrido tanto. Sin embargo, recostándose más a la puerta para no despertarlos, Thiago se gira y se encuentra con Sofía apoyada en la pared, mirándolos en total silencio.
— No sabía que podía ser tan bonito tenerlos así. Me alegra