Capitulo 10
“El enfrentamiento”
Después de un merecido día de descanso, Erick Montenegro regresó a su rutina laboral, preparado para enfrentar un día difícil y lleno de trabajo pendiente. Al llegar a la empresa, los cientos de empleados lo recibieron como a diario lo hacían, como una leve reverencia y una sonrisa hipócrita en el rostro. Él correspondió cordialmente a cada saludo, a pesar de ser inmensamente rico, jamás le gustó mirar en menos a nadie.
Al llegar a su oficina en el último piso, Antonio, su fiel guardaespaldas lo esperaba en la entrada con dos vasos de café caliente en las manos.
—Buenos días, señor Montenegro, necesitamos hablar con urgencia—. Esbozó una pequeña sonrisa— y le he traído su café de la mañana.
—Claro, Antonio—, abrió la puerta de su oficina invitándolo a pasar y tomando su vaso de café.
Erick se acomodó en su cómoda silla, y observó la pila de documentos que debía revisar y firmar. Le esperaba un largo día por delante.
—Este café está muy bueno— esbozó u