—¿Ah, no? ¿Y entonces para qué me quiere? ¿Qué hará con su novia?

—Para empezar, aclaremos, yo le había comentado que Sandra no es mi novia, solo salimos, pero no hemos formalizado nada.

Qué decepción, en verdad, ¿cómo puede decir eso?, cuando yo he sido testigo; es más, me ha utilizado de cupido llevándole “detallitos” y ella, con todo lo que me ha dicho enfrente de él, ¿y sale con que no son nada?

—A ver, usted me está tratando como si fuera yo un canalla y no es así, Sandra y yo tenemos un acuerdo, solo salir sin nada formal; yo lo dejé claro desde que empezamos a salir, sí soy detallista, pero eso no quiere decir nada.

—Mire, como sea, no me interesa lo que usted haga con ella, eso no cambiará que lo que pasó entre los dos fue un error, ya que si usted no le quiere dar nombre a lo que tenga con Sandra, déjeme le digo que yo sí tengo una relación seria, yo sí amo a mi novio y por ello es que le pido que dejemos esto hasta aquí, ok.

—¿En verdad lo ama?

—Sí, aunque le cueste cree