Un mes después, llegó una lluvia grande — una lluvia que duró tres días y tres noches, inundando parte de la aldea y el bosque. Los riachuelos se desbordaron, y algunas casas de la manada se llenaron de agua. Liam y yo reunimos a todos los residentes de la Luna Aullante y la manada para ayudar.
“Tenemos que ayudar a los que han perdido su casa”, dijo Liam en la reunión. “Todos juntos — la manada se ayuda mutuamente en los momentos difíciles.”
Marco y Luis llevaron herramientas para reparar las casas, Sofia y Elena llevaron tela para hacer mantas y ropa seca, y Carlos preparó comida caliente para todos. Rosa se quedó con Sol en la casa vieja, pero Sol quería ayudar — “Ayudar”, dijo, señalando hacia la aldea.
Recuerdo nuevo — Pensé en una lluvia grande que hubo cuando era niña. La aldea también se inundó, y mi padre reunió a la manada para ayudar. Todos trabajaron juntos — reparando casas, llevando comida y agua, cuidando de los niños. “La lluvia puede dividirnos si no nos unimos”, dijo