Este capítulo contiene contenido sexual explícito y está dirigido exclusivamente a lectores adultos (+18). Puede incluir lenguaje sensible.
Punto de vista de Sofía
El río aún nos envolvía en su frescura, pero el calor entre nosotros no se disipaba. Jason me había llevado hasta el agua y me lavó con tanta ternura que, por un momento, creí estar soñando. Sus manos recorrían mi piel como si quisiera memorizarla, y aunque hacía solo unos minutos nos habíamos entregado el uno al otro, su mirada seguía ardiendo de deseo. Y la mía también.
Mi cuerpo todavía vibraba. Cada célula parecía recordar su roce, su fuerza, su aliento. Pero había algo más... algo profundo, incontrolable, que se agitaba dentro de mí. Quería más de él. No solo su cuerpo, también su presencia, su atención, su protección. Lo deseaba de una forma que comenzaba a asustarme.
—Sofía… —su voz grave acarició mi nombre como si fuera parte de una plegaria. Me miraba como si yo fuera suya. Sus pupilas seguían las gotas que corrían