- ¿Estás segura? – Pregunta la elegante mujer cuando su asistente le informa que, según algunos rumores del medio, el matrimonio Montenegro Villareal no es tan estable y feliz como lo han hecho creer en los últimos dos años.
- Si señorita, varios empleados de la empresa dicen que en realidad ellos nunca se muestran cariñosos o cercanos en la empresa, que más bien parecen dos desconocidos, y ayer una de ellas escucho algo de que el presidente Maximiliano estaba furioso porque la vicepresidenta no fue a trabajar y adicionalmente escucho algo de que se iba o se fue de la villa donde viven. – Informa Luisa la secretaria y mano derecha de Lorena Álvarez, Ceo de Constructora Álvarez y eterna enamorada de Maximiliano. - Contrata a alguien que investigue toda la situación y los pormenores, lo quiero saber todo. – Instruye con una gran sonrisa en sus labios de solo pensar que podría estar cerca de lograr su sueño y convertirse en la señora Montenegro, noticia que también puede alegrar a alguien que conoce muy bien. - Si señora, de inmediato. – Responde Luisa y sale a cumplir con el pedido de si jefa, mientras esta hace una importante llamada, que rápidamente es respondida y la voz al otro lado de la línea si lo demuestra - Vaya, estaba seguro que te habías olvidado de mi querida, tan bien que no la pasábamos. – Bromea Saul Ibáñez, gerente general de Industrias Villareal y ahijado de Fabricio Suarez, tío materno de Sofia y quien desde la muerte de sus padres y luego la de Patricio ha querido manejar la empresa, lo que solo fue evitado con el matrimonio de Sofia y el respaldo de los Montenegro. - Ya quisieras, pero no llamo por eso, más bien es por algo que te podría interesar. – Sonríe con malicia Lorena, si lo logro una vez porque no dos, mas ahora si lo que los rumores dicen es cierto y Maximiliano y Sofia no se soportan y se están separando. - ¡Oh¡, ¿Qué puede ser eso? – Pregunta intrigado Saul. - Sofia Villareal. – Es lo único que menciona Lorena para que los ojos de Saul brillen. - Te escucho. – Responde inmediatamente. Ya Lorena sabia el efecto que tenía Sofia en Saul, así que sabía perfectamente que esa sería su reacción. - Escuche por ahí que se va a divorciar. – Suelta Lorena, lo que hace que la sonrisa de Saul sea aún más grande. - ¿Estás segura? – Pregunta para confirmar. - Ya lo estoy investigando. – Responde. – Pero las fuentes son confiables. – Añade rápidamente. - Averiguaré por mi lado. – Dice Saul. – Agradezco mucho la información, te hare llegar mi recompensa y cuando quieras podemos recordar viejos tiempos. – Se despide coqueto Saul. Esas, sí que fueron buenas noticias para él, por varias razones y de ser cierto lo puede aprovechar muy bien, así que rápidamente salió de su oficina para dirigirse a la de su padrino que es como un padre para él. - Padrino a que no sabe de qué me acabo de enterar. – Entra Saul diciendo a la oficina de Fabricio, con una amplia sonrisa que casi cubre su rostro. - Algo muy bueno debe ser para que tengas esa cara de idiota y hayas entrado sin tocar. – Responde Fabricio que está revisando unos documentos. - Claro que es muy bueno, dime padrino, ¿Qué pasaría si Sofia y Maximiliano se divorcian? – Dice con una gran sonrisa, con lo que se gana toda la atención de Fabricio. - ¿Es eso posible? – Pregunta claramente interesado. Ya que de ser cierto todos sus problemas se solucionarían. - Puede, pero ya lo estoy confirmando. – Responde rápidamente. - De ser así, los accionistas ya no apoyarían del todo a Sofia y podríamos tomar el control, los Montenegro ya no podrían hacer nada más que representar su porcentaje de la empresa, por fin Industrias Villareal cambiaria de dueño. – Dice emocionado Fabricio. - Así es. Además, me puedo convertir en tu sobrino. – Dice con satisfacción y ese sería un beneficio adicional para Fabricio. - Espero que no lo arruines esta vez. – Le recuerda y Saul solo asiente con una mueca de rabia al recordar lo sucedido años atrás.