El incidente de la Fisura del Espejo había marcado el fin del Año de la Inmunización Sensorial y la madurez de Kael, su 10 de convicción ahora incluía la verdad de su propia fragilidad, una transparencia absoluta que Lysander, con dieciocho meses de edad, aceptaba como el estándar, la segunda fase del Plan Quinquenal de Modulación había terminado, y era hora de iniciar la tercera: el Año del Desafío Controlado.
Lysander ya sabía que la mentira maliciosa era tóxica, que el ruido bajo era trivial, y que la ficción intencional era segura, pero aún le faltaba la herramienta emocional más crítica para sobrevivir en el mundo real: la capacidad de permitir que el eufemismo existiera sin confrontación.
Un eufemismo, o una mentira defensiva, no busca engañar al Espejo Emocional (Kael), sino proteger la paz social de una verdad innecesariamente hiriente, Lysander debía aprender a modular su don por elección ética, y no por obligación.
"La próxima prueba es la más peligrosa, Kael," advirtió Elar