VICTORIA
Una pequeña celebración se alzó en la noche para nosotros, como una despedida y como un gracias.
Los guardianes aún seguían algo tensos en la presencia de Lucien y se mantenían alejados de él tanto como podían.
Parecían evitarlo como a la peste, no es para menos, esa “sutil” amenaza de seguro aparecerían en sus pesadillas.
Me levanté para ya irme a la pequeña paz de la casita que me dieron.
Me di un baño rápido y me acosté desnuda. Quiero ver qué tanto aguantará, Lucien. Una sonrisa maliciosa aparece en mis labios al imaginarlo todo tenso.
—“Vas a perder, y lo sabes”
La puerta se abre y solo observo a Lucien allí parado, comiéndome con la mirada.
Creo que sí voy a perder porque esa mirada es suficiente para prenderme.
—Nena…
… —Te vas a bañar primero antes de venir a dormir.
—¿Dormir?— estoy a poco de reírme por ver su cara de horror y ansiedad.
—Sí, dormir, ahora ve y date prisa que tengo mucho sueño— me di la espalda mostrándole claramente m