Capítulo 229
Alexander caminaba unos pasos adelante, escuchando distraído los comentarios animados de Isadora y sus hijas. Al notar que los chicos tardaban, giró ligeramente el rostro hacia atrás.
Vio cuando Matthew soltó la muñeca de Oliver y le dio un leve empujón en el hombro, como quien dice «todo va a estar bien». Oliver, con semblante preocupado, le sonrió a su hermano después de horas de angustia.
Alexander contuvo un suspiro emocionado.
Por dentro,sintió orgullo de sus muchachos. Matthew estaba cumpliendo su papel de hermano mayor, protegiendo y guiando a Oliver, exactamente como siempre soñó ver entre sus hijos.
«Tal vez este fin de semana sea el comienzo de una nueva etapa para todos nosotros», pensó, mientras disimulaba la mirada y volvía a concentrarse en su esposa, que hablaba sobre lo que llevarían a la finca.
Pero dentro de él, había una certeza: esa unión entre hermanos sería el mayor legado que podría dejar.
En la limusina, Isadora y Lívia estaban una al lado de la ot