Dos años atrás
Dante
Iba a toda velocidad; Mojón y Lobo venían viajando. Ellos no sabían lo que sucedía en este instante. Cuando fue por su morral, me lo puse en la espalda así alejaba sus senos; hace un momento fue un poco incómodo. Era como si nuestros cuerpos sí recordaran lo que nuestra mente tenía en blanco.
—Dobla a la derecha, luego de tres cuadras a la izquierda. Debes tomar la avenida e interceptar la interestatal. Salgan de Las Vegas. —Churrusco daba las indicaciones.
—Se acercan, Dante. —La voz de Day se notaba segura.
Eso me daba seguridad a mí. Mi padre y el cuartel nos seguían desde el satélite, el cual Rata había hackeado. Todos ellos nos veían en vivo y en directo. No fue mucho lo que alcancé a averiguar sobre las hijas de Onur. Solo confirmé lo que, por la intermediación de mi padre, pudo venir por sus hijas.
Mientras hacía mi trabajo de inteligencia, tomé fotos de los padres adoptivos de las chicas y de todos los que alcancé a ver a su alrededor a lo largo de veintic