"La verdad es que yo estaba justo pensando en eso." confesé, sintiendo cómo se encendía una chispa juguetona entre nosotros.
Liam no perdió ni un segundo y empezó a quitarse la ropa. Se quedó solo en pantaloneta, y se veía aún más lindo bajo la luz de la luna. No pude evitar admirarlo.
Cuando yo empecé a desvestirme, me dio un poco de pena hacerlo frente a él, aunque era absurdo, porque ya había hecho esto mil veces, cuando estábamos cazando con los demás. Pero, esta noche se sentía diferente, era como si la luna guardara algún secreto entre nosotros.
Después de juntar el valor para hacerlo, me dejé solo el brasier y los pantis, me acerqué al borde del lago donde Liam ya me estaba esperando, se sentía tan seguro que me animó.
Me paré a su lado y él me miró, preocupado.
"¿Estás segura?" preguntó, y yo sonreí mientras me confirmaba. Bajo esa luna, me sentía lista para hacer cualquier locura.
Sin pensarlo, me lancé de primeras al lago, y él se tiró luego. Al principio nadamos separados,