Eleanor intentaba recuperar la compostura, el dolor producido por la tristeza se había disipado reemplazado por la urgencia de la supervivencia, necesitaba un aliado que le tendiera la mano y que la apoyara.

Mientras ella tenía esos pensamientos su teléfono vibró como si supiera exactamente lo que precisaba. El nombre de Omar apareció en la pantalla, Eleanor tomó la llamada de inmediato con un suspiro de alivio.

— Omar — dijo soltando el aire suavemente.

— Eleanor, he querido hablar contigo desde hace días, pero no estaba seguro de si debía llamarte, es que no quiero ocasionarte más problemas con Tariq, pero cuando vi la noticia del helicóptero, tenía que preguntarte como estaban, ¿Cómo se encuentra Tariq? ¿Él está bien?

— Sí Omar, él está bien, pero fue un gran susto. Gracias por preguntar, Tariq no