*—Dominick:
Dominick y Dante bajaron juntos. Desde la cocina llegaba el aroma de comida recién preparada: Noah, Nicole, Tyler, y la madre de Dominick, Loren, se ocupaban de los bocadillos y la mesa. Sabían que tras el siguiente evento vendría otro aún más importante, uno que Dominick y los demás, a excepción de Callum, mantenían en secreto.
En la sala, Callum conversaba animadamente con Engel, mientras Theo y Jace ayudaban a su padre a acomodar los asientos. Dominick se detuvo un instante a contemplar la escena. Vio a Callum con Aiden, uno de los mellizos de Noah y Jace en brazos, acunándolo con una ternura que lo desarmaba, mientras Engel sostenía al otro mellizo, Julián con delicadeza. Dominick no pudo evitar sorprenderse un poco: había algo distinto en Engel, un cambio positivo que lo hacía ver más sereno.
«Quizás pronto también él reciba su milagro», pensó con esperanza.
El timbre sonó y Dominick fue a abrir. Al hacerlo, se encontró con los padres de Callum. Los había inv