La luna se había marchado, no tenía familia, solo su antigua casa, ella llevaba el corazón roto, algo le decía que las cosas no andaban bien, que su Alfa no estaba actuando bien, y lo había comprobado, lo había visto con sus propios ojos, Petya tenía una amante.

— ¿Pero que estás haciendo Petya? !Ni siquiera le diste la oportunidad de explicarse que fue lo que pasó a tu luna, deberías de estar agradecido de que ella volviera sana y salva!

— ¿No es obvio que fue lo que pasó? Ella no llegó a dormir, ¡Estaba con él!! ¿Creés que soy estúpido? Ahora déjame solo, voy a estar ocupado por un rato.

El joven Alfa, a pesar de que también le estaba doliendo lo indecible que su luna se marchara, él no perdonaría que le fuera infiel, tenía que pagarle con la misma moneda, ¿Cierto?

El beta sin poder hacer más, salió del despacho sin todavía poder creer que las cosas se hubiesen descontrolado tanto, ¿En qué momento su luna y su Alfa terminaron así?

Entonces Petya sin decir nada con rab