CAPÍTULO 38. La heredera Callaway
CAPÍTULO 38. La heredera Callaway
En cuanto vio que los guardias del señor Carson se movían, abriéndose paso entre la multitud que contenía el aliento, Henry trató de acercarse a Rebecca. No podía permitir que le hicieran aquello, que la echaran así.
Durante un instante, en el rostro del resto de los Sheppard se dibujó una sonrisa satisfecha, convencidos de que al fin la escena se resolvería a su favor. Sin embargo, aquella seguridad se esfumó en cuestión de segundos cuando notaron que la dirección de los guardias no era la que esperaban.
Los hombres uniformados, en vez de ir hacia Rebecca, avanzaron con decisión hacia ellos, agarrando a cada uno por un brazo con la clara intención de echarlos a la calle. Y Chase Sheppard dio un paso atrás, confundido, mientras Carlotta abría la boca como si intentara protestar pero no encontrara las palabras. Y Chelsea se agarró del brazo de Julie Ann, como si mágicamente ella tuviera el poder para detener aquello.
—¿¡Qué significa esto!? —exclamó e