Creo que he cometido un grave error al hacerle eso a Clío en el baño. La mirada de terror que me dirigió al separarme de ella todavía la tengo clavada en el pecho. Ahora estoy convencido de que a ella le pasó algo muy malo, y yo lo acabo de revivir. Su cuerpo entero se tensó, y casi pude oler su miedo. Sí, no me cabe duda de que a Clío le ocurrió algo terrible. Yo, siempre actuando impulsivamente.
¿Por qué no pude simplemente besarla suavemente? ¿Tenía que hacerle eso de manera tan violenta? Retrocedí el largo camino en la confianza que me había ganado con ella, porque lo que hizo de entrar conmigo en el baño y, hasta sin darse cuenta, sentarse a orinar como si fuéramos una pareja normal, demostró eso: que confiaba en mí hasta ese punto, actuando como si fuéramos una pareja real.Pero no, Leo, tenías que arruinarlo con tu orgull