Capítulo 55.
POV Valeria
Aquella tarde, mientras revisaba los últimos informes de la empresa, el sonido del correo entrante interrumpió mi concentración. Abrí el mensaje con desgano, esperando encontrar una notificación más de proveedores o algún asunto administrativo menor, pero lo que vi me obligó a enderezarme en la silla.
El remitente era una corporación de Singapur. El correo, escrito en un español impecable, proponía una alianza estratégica: utilizar nuestras instalaciones para ensamblar sus vehículos de última generación. La propuesta era clara, atractiva, casi tentadora. Ellos pondrían la tecnología y los diseños, nosotros las plantas y la mano de obra. A cambio, recibiríamos un pago altísimo por el uso de nuestras instalaciones, además de regalías por cada unidad producida.
El corazón me latió con fuerza. Era una oportunidad que podía elevar a la empresa al mercado asiático.
Llevé el correo impreso al despacho de Armando esa misma tarde. Él lo leyó en silencio, sus cejas fruncidas, sus oj