Capítulo 64
Daryl seguía de pie, con una mirada difícil de descifrar. Lilian podía sentir esos ojos penetrantes que la incomodaban cada vez más. Apretó el borde de su suéter, intentando ordenar las palabras antes de responder a la pregunta que él acababa de hacer.
—Yo… —Lilian inspiró hondo y soltó el aire despacio—. No quiero involucrarme en ninguna relación. Salvo la relación laboral.
Su voz sonó firme, fría, algo rígida. Pero sabía que era la única manera de impedir que Daryl volviera a acercársele.
Él la observó durante un largo instante, como si quisiera leerle los pensamientos.
—¿Solo lo laboral? —repitió en voz baja, casi incrédulo—. Lilian, después de todo lo que hemos pasado, ¿ese es tu respuesta?
Lilian desvió la mirada hacia el suelo de madera brillante.
—Sí. Lo siento. No quiero más problemas, Daryl. Espero que lo entiendas.
—¿Problemas nuevos? —frunció el ceño, elevando un poco el tono—. ¿Qué problemas? ¿Por qué piensas eso? ¿Acaso no estás oficialmente divorciada? Eres l