Capítulo 28. Como una hoja al viento
Angelo
La ciudad nunca duerme, pero esta noche me parece más oscura que nunca. Camino sin rumbo por las calles, con la cabeza llena de voces que no me dejan en paz. El eco de sus palabras me persigue y cada paso que doy me pesa como si arrastrara cadenas.
El ruido de los autos, las luces de los semáforos, la gente que pasa a mi lado… todo se siente distante, ajeno. Como yo. Siempre ajeno.
Me detengo frente a un escaparate iluminado. El reflejo me devuelve la imagen de un hombre que no reconozco. ¿Quién soy? ¿El hijo de Luka, el hombre que me crió con dureza y me enseñó a sobrevivir, pero nunca me dio un abrazo sincero? ¿O el hijo de ese desconocido que apareció de la nada para decirme que mi madre fue Roxanne?
El resentimiento me quema. Siempre supe que Luka me miraba distinto, que había algo en su mirada que no era amor. Ahora entiendo por qué. Para él, yo soy el recordatorio de la mujer que lo humilló, que secuestró a su esposa y que casi le arrebató a su hijo. ¿Cómo podría verme c