Katherine se había alejado de Cassian pero su mente seguía ardiendo con cada paso que daba por los pasillos. El eco de su discusión con Cassian seguía golpeando su pecho.

Lo había gritado sin importarle que alguien la oyera, desafiándolo, intentando recordarse a sí misma que no debía rendirse a él, que sus besos no significaban nada.

Pero el sabor de su boca todavía la perseguía.

Diosa, había sido tan débil con Maverik que no podía permitir que le ocurriera lo mismo con Cassian.

"Además de qué no era yo misma, cuando llegué aquí algo cambió, esa hembra me hizo algo para que actuara de una manera tan estúpida quedándome recluida como la amante de Maverik, sin salir de su casa, sin atreverme a ser otra cosa más que su amante. ¿O fue el cambio de época? De todas maneras no tengo mis poderes, esto sigue siendo tan confuso."

De solo pensarlo, se enfurecía.

"Definitivamente no voy a permitir que Cassian me trate igual."

Cassian había destituido a Serenya en medio de todos.

No lo había hecho