Capítulo 88. Un gala, dos sorpresas.
Sebastian cerro un puño a un lado mientras presionaba con cariño la mano de su esposa, no iba a detener en ese momento a Francisco, no quería arruinar una ocasión tan importante, pero aún tenía una conversación pendiente con él por el sobre que le envió.
-- Francisco… -- murmuró ella.
-- Solo vine a felicitarte – le dijo él, mirando a Melisa y luego a Sebastián. -- Por todo. Por tu familia, por tu… victoria. Lo supiste hacer bien Melisa –
Sebastián no respondió de inmediato. Observó con frialdad a su antiguo rival y dijo:
-- No recuerdo haberte invitado señor Colt –
-- Yo tampoco – añadió Melisa.
-- No necesitaba una invitación para desearles lo mejor – insistió Francisco, y luego bajó la voz para dirigirse solo a Melisa. -- Aunque debo admitir que pensé que en algún momento… me buscarías –
-- ¿Buscarte? ¿Cómo para qué lo haría? –
-- Para decirme que estaba en lo correcto. Que debiste contarle antes. Que esos cinco años no los perdiste tú… los perdió él – señaló a Sebastian con el ded