Los abuelos habían estado esperando que todo pasara para salir al lado del pequeño Bastián, sin imaginarse que el niño había captado cada parte de la información que ahí se decía.

Al escuchar a su padre declararle su amor a su mamá Bastián sonrío feliz. Su presencia iba a ser una sorpresa para ambos, pero se tuvo que retrasar por la presencia de ese par.

Una vez que los aplausos terminaron alguien anuncio la llegada de los abuelo Novak al lado del pequeño Bastián. Todos los ojos estuvieron fijos en el niño, después de todo algunos todavía pensaban que quizás Melisa podría estar mintiendo y su hijo no era de Sebastian, pero al ver al niño, ninguno volvió a dudar.

-- ¡Santo dios es la misma imagen de su padre! –

-- ¡Parecen dos gotas de agua! –

-- ¡De tal padre... tal hijo! –

Y así continuaron los comentarios por unos minutos más.

Al terminar la gala la familia de cinco se retiró del hotel.

Esa noche, ya en casa, Melisa y Sebastián se sentaron junto a Bastián en el sofá del ala este, el