Cap. 11 - La dócil gacela.

Aquella tarde llovía, los caballos estaban nerviosos, no era un buen momento para montar, pero allí estaba, empapada, frustrada con algo que me seguía preocupando, dándole la espalda a ese idiota, afianzando las correas de la silla de montar, tenía que ir a buscar a Sinuosa, y estar herida no era una excusa para no hacerlo.

No quería pensar en ese beso que ese idiota se había atrevido a robarme tan sólo unos minutos antes, o en cómo seguía allí, sin saber cómo disculparse. Tan sólo necesitaba recuperar a la yegua para así poder volver a casa.

Agarró mi mano, en cuanto vio mis intenciones de marcharme, y yo miré hacia ese punto, luego a él, sin pod

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo