Aimunan
-Sabes que siempre estaré aquí cuando me necesites - sus ojos recorren mi rostro.
-Gracias ,de verdad- Nos abrazamos sin darnos cuenta que había un par de ojos fulminándonos desde la tienda.
-Mañana te regresas con el jefe, pero no te olvides que acá tienes un amigo en el corazón de la Selva -pone cara melancólico-escríbeme más a menudo ,porque siento que terminaré hablando con las rocas -nos reímos a carcajadas.
-Ahora debo irme !,cuídate mucho.- Mi amigo marcos se va sin antes voltear a mirarme otra vez.
Pasado el rato, veo que terminó la reunión en la tienda por lo tanto me voy donde está mi jefe, y se ve que algo no salió bien ,porque está con un carón que ni les cuento.
Yo evitando causar más problemas solo me pongo a su lado ,esperando próximas indicaciones.
Creo que fue la peor idea ,porque se me queda mirando con una frialdad que espanta. Doy un paso atrás para no estar en su vista, noto que cierra los ojos y se toca el puente de la nariz con frustració