Alexander Lee (Jin-Sung)
El "juego" que Munan había declarado se sentía menos como una guerra y más como una tortura lenta. Habían pasado tres días desde nuestra llegada a Seúl, y cada minuto lo pasaba observándola.
La ironía me carcomía. La tenía a mi lado las 24 horas, y sin embargo, su presencia era más distante que cuando estaba del otro lado del mundo. En la oficina, Munan era una máquina. Desmanteló la división europea en dos días con una eficiencia quirúrgica. Su mente era un activo tan valioso que mi obsesión parecía, a los ojos del consejo, una brillante decisión de negocios.
Pero en la residencia, la teníamos a distancia. Yo monitoreaba la cámara en su penthouse (la misma luz azul apenas perceptible), y la veía trabajar en su tableta, ignorando la comida y las órdenes de mi asistente. Intentaba encontrar una grieta en su armadura, pero ella solo exhibía un agotamiento estoico. El único momento en que su fachada se resquebrajó fue cuando recibió una confirmación de lect