CAPÍTULO 51: FLORES PARA EL INFIERNO
Vanessa
El sonido de la cafetera automatizada es lo único que rompe el silencio en mi pent-house esta mañana. El aroma del café recién hecho solía tener el poder de tranquilizarme, de recordarme que soy la dueña de todo esto y que nada ni nadie puede arrebatarme lo que he conseguido. Pero hoy no siento nada. La televisión murmura en segundo plano, sintonizada en un canal de noticias financieras que suelo ignorar porque siempre son las mismas tonterías sobre acciones y fusiones.
Sin embargo, algo en el tono de la presentadora me obliga a prestar atención.
—…nuevas filtraciones apuntan a posibles actividades ilegales dentro de Beaumont Group, involucrando a altos ejecutivos de la compañía…
La taza de café se desliza de mis manos y se estrella contra el suelo, esparciendo líquido oscuro y fragmentos de porcelana por todas partes. Me quedo inmóvil, con la respiración entrecortada. Mi nombre aparece en la pantalla, sobre imágenes de documentos confidenc