Hpy seria el día en que Bris hablaría con el medico, no sabia como saldría eso, pero esperaba que todo estuviera bien. El doctor era un hombre muy ético y no sabia si aceptaría hacer lo que teníamos en mente, pero no podíamos dejar las cosas asi, era necesario ahora que Karen creyera que su hijo estaba muerto, solo de esa manera todos pensarían que si era mio.
Llegamos al consultorio del medico, las manos me temblaban y tambien me sudaban, eso siempre me solía pasar cuand estaba nerviosa.
—Traquila, si el no lo hace encontraremos quien si —dice Bris regalándome una sonrisa.
—No quiero que lo mates, por favor —el rie.
—No es necesario, nena, el dinero compra mucho más—asiento tomando asiento frente al doctor.
—Buenos días señores Myres, mi secretaria m comento que querían hablar conmigo urgente, ¿pasa algo?
—Si, pasa, necesito que haga algo —el doctor levanta una de sus cejas por las palabras de Bris.
—¿Es sobre la mujer que tenemos aqui? —asiento.
—Si, es sobre ella, necesitamos