Celos de espuma.
—¿Sam,nos encontraste?—balbucea Mark carraspeando la garganta.
—¿Qué diablos pasa ?—pregunta Sam mirándome fijo con un tono endurecido.
Evado sus palabras bajando la vista , estoy lo suficientemente enojada como para no mirarle ,pero lo suficientemente apenada como para responder siquiera.
—Dije,¿qué pasa?...¿eres sordo Mark?—insiste Sam caminando hacia Mark ,con los puños cerrados y la mandíbula apretada.
—¡Hey!...¿qué pasa hermano?—disimula Mark usando las manos de escudo, condenado a obedecer por la evidente culpa que siente.
Sam lo toma por el pulover desgastado bajo su cuello,tiene las venas del cuello hinchadas y un puño casi sobre su cara.
—Te dije qué a ella no la tocaras,¿te reviento la cara o te arranco la garganta?—grita Sam cómo si le diera opciones.
—Vas a seguir,dimeeee Sam,causas problemas siempre,¿quién te crees?...no somos nada , así qué déjame en paz —le grito tan enojada a Sam que me tiembla la voz y se me escapan las lágrimas.
—¿Nada?...Estela aguarda...—grita Sam