Álvaro también la reconoció y le respondió una sonrisa de inmediato.
—¿Eres Joana? ¡Qué coincidencia! ¿Qué te trae por aquí?
Lucía inclinó la cabeza y sonrió suavemente.
El doctor Rojas era el casamentero de ella y Jorge. Pero él no sabía que ella se casó para reemplazar a Joana.
—Soy Lucía.— Ella sonrió, —Esto es un poco complicado. Te lo explicaré más tarde.—
Álvaro se quedó inmóvil por un segundo y luego dio una sonrisa amplia: —No importa si eres Joana o Lucía. Eres hija de la familia García. ¡Qué exitoso casamentero soy!—
—Por cierto, ¿cómo te va con Jorge? Desde que os mudasteis al pueblo Santo Córdova y yo también me fui a la facultad de medicina de la Ciudad Central para ampliar mis estudios, ¡no hemos tenido contacto!
—Estamos bien.— Lucía contestó suavemente, —Puedes venir a mi casa después del trabajo. Jorge lleva mucho tiempo sin verte. ¡Cocinaré unos platos más y podréis tomar unas copas.—
—No es necesario.— Álvaro agitó la mano, —Tengo muchos historiales médicos que ver..