Capítulo 765
Hugo no tuvo marcha atrás y se llevaba a Patricia como rehén.

Polo le miró con cara inexpresiva.

—Hugo, ¿de verdad crees que puedes amenazarme con ella?

—¡Je, no puedo amenazarte con ella! ¡Pero puedo amenazar a ese tonto de tu familia!

Se le cambió el color de la cara de Polo.

Sin que Hugo lo supiera, Polo ya tenía pruebas de sus crímenes y las había entregado a la policía, y las pruebas de Patricia eran en realidad irrelevantes.

Los hombres de la zona austral se enfrentaron a él con las pistolas en sus manos.

—¡Haz que bajen sus pistolas! —Hugo gritó histéricamente—. O si no... ¡materé a la puta!

—¡Polo! ¡Polo! —Llegó un grito.

Pedro corrió despavorido y fur detenido por Polo.

Gritó ansiosamente: —¿A qué esperas? ¡Diles que bajen las pistolas! Tu tía está en manos de este hombre.

Polo le miró con expresión fría.

Fue él quien hizo traer a Pedro.

Esas cosas había que verlas con los propios ojos.

—Cariño... — Patricia había perdido mucha sangre y estaba a punto de desmayarse, en cuanto
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App