50. No era lo que esperaba
Stefanos
Música del capítulo: “Secession Studios – Burden of the Crown”
La puerta de la oficina se cerró detrás de mí con un chasquido seco. Nuria caminaba un paso atrás, el perfume sutil de flores del campo invadiendo el ambiente como una afrenta a la formalidad sombría de aquel lugar.
El Alfa Supremo estaba sentado a la mesa, con las manos unidas sobre los papeles que probablemente no leía. No lo necesitaba. Su presencia por sí sola ya llenaba el espacio. No usaba corona, medallas o uniformes llamativos. No necesitaba nada de eso. Su autoridad era tan natural como la sangre que corría por nuestras venas.
Cuando me vio, levantó los ojos y luego pasó por mí... directo hacia ella.
"Así que esta es la famosa sangre azul." Su voz era tranquila. Sin asombro. Sin reverencia. No parecía impresionado. Ni curioso. Solo... calculador.
Nuria no respondió. Permaneció en silencio, con la postura erguida, la barbilla firme. La luz suave de la ventana se reflejaba en los hilos trenzados de su cabel